Matín Gelabert Tapia nos contó su historia.

El suceso de su familia, cuando arribó a México, se remonta a inicios del siglo pasado, su abuelo de origen español, Pedro Gelabert Serra realizaba travesías comerciales entre Europa y America.

El navegante y comerciante ibérico, nacido en Palma de Mallorca, visitaba de forma recurrente los puertos de Veracruz y Coatzacoalcos. Traía y llevaba mercancías de un continente a otro y viceversa.

Un día, del año 1928, el abuelo decide venir a Coatzacoalcos, donde con su familia, dos hombres y siete mujeres (esposa e hijos), se queda a vivir en este puerto.

Mientras en España, su fortuna fue desaparecida por sus parientes ibéricos.
Ante los cambios de suerte, el abuelo se queda a trabajar en el puerto, sus hijos e hijas se casan aquí, y los migrantes europeos integran la sociedad de Coatzacoalcos.

Mientras tomamos varias tazas de café, en diferentes restaurantes de la ciudad, Martin, nos narró que su padre, Pedro Gelabert Martinez, quien llegó del extranjero a los ocho años de edad.

Entre vagos recuerdos, apuntó que el abuelo Pedro Gelabert Serra trabajó en la compañía Petrolera El Águila, la antecesora de lo que hoy es Petróleos Mexicanos PEMEX.

Al fallecer el abuelo, su padre tuvo que trabajar muy joven, cuando apenas tenía unos 14 años, precisó nuestro entrevistado, que aún menor de edad entró a la industria petrolera.
Ya como trabajador, don Pedro Gelabert Martinez fue socio de la sección 31, al lado del liderazgo de don José Vasconcelos Morales.

Martín Gelabert Tapia precisó que su padre estuvo varios años compartiendo el liderazgo con don “Pepe” Vasconcelos.

Recordó que la afición de su padre por el mar y la pesca, lo llevó a junto a don Ismael Pavón Bremont, Porfirio Castillo y Billy Jean Parker a transformar el Club de Pesca.

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